NUEVOS ANALFABETOS

POR FERRAN GUTIÉRREZ

Si buscamos la palabra “analfabeto” en el Diccionario de la Real Academia obtenemos la siguiente descripción:

analfabeto, ta. (Del lat. analphabëtus).
1. adj. Que no sabe leer ni escribir.
2. adj. Ignorante, sin cultura, o profano en alguna disciplina.

Por suerte, para la primera entrada cada vez hay menos personas. En los países con escolarización obligatoria, el analfabetismo es minoritario.

Pero incluso en esos países, en lo que se refiere a la segunda entrada, con el avance de las nuevas tecnologías, los niveles de exigencia de conocimientos para desenvolvernos van más allá y aparece un nuevo nivel: el analfabetismo digital.

Es un proceso de la cultura de la nueva economía que consiste en carecer de la formación necesaria para utilizar las nuevas tecnologías, especialmente Internet. En este grupo, hay más gente de la que imaginamos y eso no es lo peor: lo realmente grave es que muchas de esas personas renuncian expresamente a manifestar el más mínimo interés por el funcionamiento básico de Internet, lo que obviamente hace muy difícil que aprendan a manejarse.
Hoy en día, no sirve decir “a mí no me interesan las nuevas tecnologías”, pues nos afectan en todos los campos. No se trata de ser un experto profesional, si no más bien un usuario con los conocimientos fundamentales para saber como funciona un correo electrónico o una página Web.
De ese modo, la sociedad en general evitaría perder un montón de horas en repetir explicaciones a personas que no escuchan porque piensan que no va con ellos. Señores y señoras, el futuro ya ha llegado y se “escribe” cada día, pero para quien sepa “leerlo”.

¿Se imaginan un empresario de principios del siglo XX que se hubiese “negado” a aprender a utilizar el teléfono o el fax en su empresa? Es fácil imaginar a donde llegarán los negocios de aquellos que no aprendan a “leer” y “escribir” a través de Internet.